domingo, 25 de abril de 2010

Dragones y princesas

23 de Abril

El día que no me acuerde de esta fecha, mis axones habrán dejado de interconectar mis neuronas. Al igual que a los franceses desde pequeños les dicen: "Francia es grande, seamos patriotas", desde que recuerdo quien soy, el 23 de abril he moldeado rosas de plastilina, papel pinocho o celofán. Y cuando ya aprendí a redactar, subí un escalón, ¡participaba en los Juegos Florales!

Ramblas y paseo de Gracia se embriagan del perfume de las rosas. El rojo de las flores se mezcla con las cubiertas de los cientos de libros expuestos a pie de calle. Y los ciudadanos, quien sabe si más consumidores que lectores, acabarán quizás con un libro en el bolsillo. Y en ese libro quizás una firma guarde el recuerdo de esa tarde primaveral. Puede que Rosa Regás esté inspirada y tu nombre se acompañe de una bonita dedicatoria, o que el escritor del momento estampe apresuradamente el tampón de su firma mientras eleva su mirada y te entrega el libro. ¡Siguiente! Fluiremos en el río de gente que a veces se aremolina frente al stand de un famoso, dónde por ejemplo el año pasado una mujer gritaba emocionada: "¡President!", al ver a un carismático Jordi Pujol.

Recuerdo cuando ví a Saramago y casi se me saltan las lágrimas, ni Noriega ha conseguido eso. Cuando su mano temblorosa caligrafió mi nombre y pensé: "Este abuelito es un premio Nobel de literatura, es un vidente entre los ciegos".

Y todos estos componentes se mezclan con la leyenda de un príncipe que salvó a un pueblo de un dragón. Una princesa que fue salvada por ese mismo príncipe. Y la sangre de un dragón que se convirtió en un jardín de rosas.

Si extrapolamos todos los personajes, ¿quién serían hoy nuestros príncipes y princesas? ¿Quién sería el dragón que todo destruye y amenaza? Allá cada uno, pero viajando por Europa, he visto lo importante que este caballero es para numerosas culturas.

Es una tarde soleada y aunque no tenga rosas, sentada en la librería Shakespeare veo a través de la ventana un hermoso cerezo en flor. Embelasada por la belleza de esas flores rosas y rellenitas que roban protagonismo a Notre Dame y sus turistas, intento encontrar unas palabras para escribir aquí. Pero nunca encuentro la inspiración en estos sitios. No sé dónde la encontrarían Shakespeare o Cervantes. Curioso que un día separara la desaparición de estos grandes escritores del s. XVII. A veces las casualidades son más que abrumadoras. Y hablando de desaparaciones, no puedo acabar este post, sin dedicárselo a una de las personas que más han ayudado a que Barcelona sea hoy más que una ciudad, y a promover nuestro deporte a través del mundo: Juan Antonio Samaranch. Muchas gracias.

¡Feliç Sant Jordi!

domingo, 18 de abril de 2010

Domingo retenidos: Volcanes, huelgas...

El sol se ha instalado en París, originando una nueva vida en los diques del Sena. Los habitantes y turistas acuden en masa para organizar pequeños picnics en los bancos del río o en los parques de la ciudad.
Aquí nada de calimocho y cartón, buen vino y copas de cristal, como sugieren algunos, acompañados de fresas, patatas, ensaladas o hasta sushi. Y todos vegetamos cual lagartos sonrientes que absorven los cálidos rayitos para pasar del blanco mantequilla al rojo tomatito.

Y este fin de semana podemos decir que los quais estaban más llenos que nunca. París se ha convertido en una ratonera, una ciudad aislada del mundo. Quien nos iba a decir que un volcán que hasta ahora nadie conocíamos, y del cual aún desconozco el nombre, pueda causar tales consecuencias. Aeropuertos de París cerrados al menos hasta mañana a las 8. Pero si juntamos la nube volcánica con la huelga de trenes, de aquí no sale nadie!! ¿Huelga? Si, desde que llegué aquí esta es la tercera huelga del SNFR. Y como no, esta mañana después de haber salido y sólo haber dormido que 4 horas, nos plantamos en la estación para ir a Orleans, yyy tachan!!! Tren anulado, pues súmenle más de 1h de cola para que nos devolvieran el dinero, y a eso le llamo yo empezar un domingo con buen pie.

A pequeños males, grandes soluciones. Hemos acabado en un mercado del 20eme, a 1€ el kg de fresas de Huelva (¿A cuanto las estan comprando? Impresionante) y 2€ los pimientos. Vamos que me voy a ir allí más de un domingo, considerando que los pimientos en el Día van a 4€!! Vivir estos momentos de mercado parisino, con el bullicio, el vendedor gritando, las colas es trasladarte a una de esas múltiples caras que tiene esta ciudad.

Cerca de allí, visitamos el cementerio Pere Lachaise. No sólo están enterradas grandes personalidades, como Jim Morrison, Edith Piaf o Oscar Wilde, sino que la antigüedad y la ostentación de algunas tumbas es impresionante. Perdiendonos por sus sectores, hemos llegado a la tumba de Chopin. Este año se celebra el bicentenario de su nacimiento; numerosas flores y algunas velas cubrían su tumba, junto una figura de una mujer tocando el harpa. Aunque esté enterrado aquí, su hermana cogió el corazón del compositor y lo llevó en contrabando hasta Varsovia, dónde reposa en una de las mayores iglesias de la capital. Y esta adoración a Chopin, me ha recordado la unión de un pueblo frente a otro capítulo más en su historia negra y triste. Polonía se ha convertido en una gran iglesia acogedora de un pueblo en duelo y unido, que con las miles de velas alumbradas y su silencio y respeto a honrado honores a su Gobierno. Y es que como me dice un amigo, decir que eres polaco es muy duro, porque representa que al menos la mitad de tu familia ha sido asesinada.

sábado, 10 de abril de 2010

END ROAD TRIP

Para poner la guinda a estos tres post dedicados al viaje en coche de Semana Santa, aquí dejo un documento gráfico del viaje creado por Tebita ;)

Clica aquí

miércoles, 7 de abril de 2010

ROAD TRIP 2: LJUBJANA

Cuando uno confunde Eslovenia con Eslovaquía, es que no ha estado en ninguno de los dos. Este viaje me ha enseñado algunas cosas:
- Ibamos a Eslovenia
- Hay euro
- Tienes que comprar una etiqueta llamada vignette para poder viajar por las autopistas. Ésta se compra en el puesto fronterizo. Nos costó 15€ para una semana

Pero antes de todo eso, se completó el equipo y ya estábamos los cinco pollitos verdes preparados para empezar el recorrido.


Ljubjana

Casas okupas + Arte en la calle: Me encanta!!




Divirtiendonos en el H&M un must si viajas con Blanca o Marcos, jejeje


Panetone para celebrar el falso cumple de Marcos. Fue la única manera de comernos un trozo. Acabó en la papelera del aeropuerto, despúes de que Fran y Marcos le dieran algún chute. Sin duda, la mejor compra, hasta de almohada ha servido ;)


Lago de Bled: Aire puro acompañado de una buena cecina de león y de pan esloveno. Buenísimo!! Nos acordamos de Dani, ¡cuanto ha viajado esa cecina!

martes, 6 de abril de 2010

ROAD TRIP 1: Venezia

Todo empezó una tarde-noche cuando empezamos una party-line unos cinco locos para decidir que haciamos en semana santa. Buscando un punto de inicio dónde nos saliera económico volar, surgió una ruta: Venezia - Ljubiana - Zagreb - Venezia.

La organización tardó en llegar, pero justo la semana del viaje acabamos cerrando más o menos todo.

Venezia
Siete años atrás visité esta ciudad, ahora redescubierta. Hemos callejeado mucho, tanto que nos perdiamos y volvíamos a pasar por el mismo sitio.

Ese primer día, fuimos unos perracos y es que cuando Marcos y yo llegamos al hostal teníamos al Fran durmiendo. Nos costó un rato animarnos y salir a dar una vuelta por la isla del Lido. Quietud, lluvia, playa, casitas. En ese momento fue cuando compramos nuestro no desayuno: PANETONE. Esperamos a Teba, que llegó con algo de retraso... y es que el día que a nadie le pase nada con los trenes o los aviones será un verdadero milagro.

Ya juntos los cuatro partimos en Vaporetto a Venezia, está oscureciendo y el atardecer desde un barco es magnífico, tanto que nos inspira para hacer alguna foto "original".



Desembarcamos al lado del puente de los Suspiros, que nos creó un gran suspiro de decepción, pues está en renovación y han puesto unos paneles publicitarios alrededor que son casi más grandes que el propio puente.

Antes de llegar a Rialto, un gondolero nos pilló por banda, y por 70 euros nos hizo una ruta a los cuatro. Aunque sea una turistada, Fran no había subido nunca y por ese precio, no nos lo perdimos. Eramos el último turno de nuestro gondolero. Un chico guapo y jovencito que llevaba dos años en el oficio, más dos años de escuela de gondolero. No os penseis que esto es cosa fácil. Tienen que aprender la historia de Venecia y al menos otro idioma a parte del inglés, creo que era alemán o francés.

La embarcación se desplazaba por canales vacíos y calles oscuras. Cuando llegábamos a una esquina, el gondolero chillaba algo para avisar y no chocarnos. Finalmente accedimos a uno de los grandes canales, que tienen una profundidad de 6m. Nos dejó cerquita del puente de Rialto, dónde empezó nuestra odisea para cenar. Aunque al final encontramos un sitio.

La plaza de San Marco, quizás una de la más bonitas del mundo. Tenía un encanto particular, ya de noche, medio vacía, con pequeños charcos que reflejaban las luces de los antiguos cafés. Un olor a incienso que embriagaba toda la plaza y la música que surgía de un violín y un piano acompañando el movimiento de las góndolas ya descansando en el puerto.